Puede recoger todas tus lágrimas, y hecharlas por la ventana. Puede eliminarme sin un segundo vistazo, puede que te arranque todo lo que dejé. Pero sé que tu no quieres despedirme, y de alguna manera me siento culpable. Pero es inesperado el final de esta pista de carreras que llamamos vida. Por eso regresa, vuelve a mí, mis brazos te esperan, ya no estarás solo. Hemos caído varias veces en la carrera, pero espero verte en la línea de meta. Todos tus amigos quieren manejarte y no entienden que vas a otra velocidad, en la que no te pueden seguir. Hice todo lo que pude, y di todo. Pero es momento de que sigas con tu camino, un camino que no es para mí.