¿Porqué nos equivocaremos tanto? Tu me engañas con tu sonrisa y yo te sigo con mi inocencia. Me advierten, me repiten, que no me acerque. Y entonces juego a ese juego llamado orgullo. Una de cal y otra de arena. Pero siempre en el fondo deseo que corras y vengas a buscarme. ¿Y qué hago yo? ir volando hacia ti como los insectos a la luz. Quien juega con fuego termina por quemarse. Yo solo quiero probar..