Cuando tengo que describirme siempre suelen salirme muy fácilmente los defectos. pero, cuando llego a la parte de las virtudes no sé qué poner. Si le pregunto a alguien qué es lo piensa de mí, suelo sentir que lo que me está diciendo es sólo de compromiso y para no desagradar. Quizás no es que no sepa describirme, sino que no me conozco. Y si yo no me conozco, ¿cómo puedo pretender que otros lo hagan? No es porqué soy complicada, porque creo que no lo soy en exceso. No es porqué soy cerrada, tampoco por lenta. Sino porque perdí el interés por mi misma. No me afectan los insultos de otros hacía mi persona, porque no tengo amor por ella. Entonces, repito ¿cómo puedo pretender que otros lo hagan?