Quien sufre de amor a distancia sueña con una posibilidad de poder conseguir estar con la persona amada, o incluso pide todas las noches para inventar un tipo de teletransporte, aunque puede que nunca sea posible. Quien ama a distancia no se rinde y no se olvida. Trata de tener siempre a esa persona en alguna forma, ya sea en pensamientos, ya sea en sueños, o incluso los latidos del corazón. Porque donde hay amor hay esperanza.